Ingredientes:

 1 semilla de aguacate (de un aguacate maduro)
 1 litro de agua
 Jugo de medio limón (opcional, para potenciar el sabor y los antioxidantes)
1 cucharadita de miel pura (opcional, para endulzar)

Preparación:

Paso 1: Prepara la semilla
Lava bien la semilla de aguacate para eliminar cualquier resto de pulpa. Sécala con una toalla limpia y córtala en trozos pequeños o rállala con un rallador fin

Paso 2: Hierve el agua
Coloca el litro de agua en una cacerola y llévala a ebullición. Añade los trozos o el polvo de la semilla de aguacate.

Paso 3: Infusiona los nutrientes
Reduce el fuego y deja que la semilla hierva a fuego lento durante 15-20 minutos. El agua tomará un tono rojizo, señal de que los compuestos activos se están liberando.

Paso 4: Añade el limón (opcional)
Retira la cacerola del fuego y deja enfriar ligeramente. Si lo deseas, exprime el jugo de medio limón para potenciar los antioxidantes y darle un toque refrescante.

Paso 5: Cuela y endulza
Pasa el té por un colador fino para eliminar los restos de la semilla. Añade una cucharadita de miel pura si prefieres un sabor más suave

Paso 6: Sirve y disfruta
Sirve el té caliente para un efecto reconfortante o déjalo enfriar para una bebida refrescante. Puedes añadir una rodaja de limón para un toque visual y aromático.

Cómo tomar este té para resultados óptimos

El ritual que transformará tu salud
Toma una taza (250 ml) de este té en ayunas cada mañana durante 10 días consecutivos. Esta rutina permite que los nutrientes actúen profundamente, mejorando tu digestión, reduciendo el colesterol y fortaleciendo tu sistema inmunológico. Después de los 10 días, puedes tomarlo 3-4 veces por semana para mantener los beneficios a largo plazo